Estamos acostumbrados a trabajar largas jornadas para tener un buen sueldo, hasta el punto de olvidar nuestra paz mental y felicidad. Incluso hay quienes piensan que no hay vuelta atrás, cuando en realidad, si es posible cambiar el rumbo de las cosas. ¿Te interesa saber cómo vivir feliz en el trabajo? ¡Sigue leyendo!
Confucio decía: “Encuentra un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida«. Sin duda, es una frase poderosa que muchos ignoramos, pues estamos adaptados a esforzarnos para pagar facturas y postergar nuestros sueños.
Muchas veces sin pensar que la actitud que tenemos en nuestro trabajo influye directamente en el día a día. Está comprobado que el 90% de los problemas de salud se relacionan con el estrés. De allí que se tan importante encontrar la felicidad en el empleo, pues es donde pasamos gran parte del tiempo.
Entonces, ¿cómo podemos vivir feliz en el trabajo? A continuación te enseño algunos trucos que pueden ayudarte a tener mayor bienestar, rendimiento y felicidad en tu lugar de trabajo:
1. Aprende a ser flexible ante los cambios
Lo más seguro en la vida son los cambios, asi que es necesario mantener la apertura y la flexibilidad hacia las nuevas experiencias, pues estas no tienen porque ser negativas. Al contrario, por lo general siempre traen un nuevo aprendizaje y nos hacen avanzar, haciéndonos capaces de adaptarnos a situaciones inesperadas.
Recuerda que nadie es imprescindible en la vida, cada semana puedes aprender algo nuevo, asi que es importante que estes actualizado(a). Además, la flexibilidad es una «Power Skill» necesaria en cualquier empleo.
2. Reconoce tus logros en el trabajo
Si al hacer un balance de tu vida profesional, lo primero que recuerdas son las experiencias negativas, por ahí ya estás mal. Es momento de valorar todo lo que haces bien y premiarte a ti mismo.
Claro está que no hay que olvidar ser realista y reconocer tus limitaciones y defectos, pero sin ser tan duro(a) o cruel, pues a veces nuestro peor enemigo somos nosotros mismos.
El autoconocimiento y la reflexión son básicas para el éxito y la felicidad laboral. Un pequeño ejercicio para empezar a valorarte consiste en despertar cada mañana y sonreír, agredecer por lo que tienes y visualizar que será un día grandioso.
3. Rodéate de personas positivas y felices
Detectar la negatividad en las personas resulta sencillo, seguramente te ha pasado más de una vez que hablas con alguien que solo se queja, todo lo ve mal y nunca aporta soluciones.
Recibir ese tipo de energía tan pesada solo hace que te reduzcas y todo lo veas con pesimismo. Por ello, es importante utilizar la inteligencia emocional a tu favor, buscar siempre el lado bueno en las situaciones y mostrar empatía con tus compañeros de trabajo.
Tener una buena relación con los compañeros de trabajo hace que brillemos en todo lo que hacemos, además un ambiente armónico asegura el éxito de la empresa y/o negocio.
No juzgues a los demás, ignora los chismes o comentarios negativos sobre otras personas, evita ser eco de estos y también, si llegas a tener algún pensamiento negativo sobre alguien, déjalo ir y sigue adelante.
Las personas con las que trabajas son probablemente con las que pasas mayor parte del día, así que es esencial mantener una relación sana, mostrar empatía y cierto interés por cómo están.
4. Intenta vivir en el presente en tu trabajo
Muchas veces pensamos tanto en el futuro y en lo que puede ocurrir que nos olvidamos del aquí y el ahora. Hay que intentar ser feliz con el hoy y con los recursos que se tienen al alcance de la mano.
Ser más atento(a) y dar gracias por la vida, el empleo, el hogar y la familia forma parte de lo que significa vivir el presente. Ponlo en práctica y verás como te sentirás mucho más feliz.
¿Por qué es importante vivir feliz en el trabajo?
Sentir bienestar laboral es vital tanto para tu salud como para las empresas. Un trabajador feliz es un trabajador más comprometido y menos estresado, más productivo, comete menos errores y termina sus tareas a tiempo.
En fin, un trabajador feliz es todo lo que una empresa y/o negocio necesitan para perseguir el éxito. Por esta razón, cada vez más empresas se preocupan por generar un ambiente armónico en donde los empleados se sientan más felices y comprometidos, y por ende redunden en términos de eficiencia y rentabilidad.
Pero como lograrlo no es tan fácil, ya que cada individuo es responsable de su propia felicidad, lo único que las empresas pueden hacer es crear las condiciones adecuadas para que cada empleado encuentre su propia motivación.
Normalmente, una persona se siente impulsada cuando tiene autonomía para realizar su trabajo, es capaz de mejorar sus habilidades y además trabaja con un propósito.
En resumen, vivir feliz en el trabajo se logra fundamentalmente cuando haces lo que te gusta —o cuando consigues que te guste lo que haces—, y por tener una buena relación con los compañeros.
A veces habrán problemas, conflictos o emociones que no sabrás manejar, pues una empresa con trabajadores felices no es precisamente un paraíso. Un ambiente armónico no evita que existan los debates o las diferentes opiniones. Sin embargo, lo importante es superar los malos ratos, respetar a nuestros compañeros y cada día dar lo mejor de sí mismo.